viernes, 30 de mayo de 2008

Cáncer oral: el diagnostico precoz pendiente de una prueba de uso limitado en España



Aunque la mayoría de los pacientes que desarrollan cáncer oral son fumadores habituales, lo cierto es que más del 25% de ellos no fuman. Cada año se diagnostican una media 60-70 tumores de cavidad oral por millón de habitantes, lo que supone una incidencia de 6 casos por cada cien mil habitantes y año. Este tipo de carcinoma afecta a varones entre los 45 y los 65 años, con mayor incidencia alrededor de los 60 años. Se presenta con mayor frecuencia en el sexo femenino, con una relación varón/mujer de 1,5-3,5 variable según las distintas series mundiales.

El consumo de tabaco y alcohol y más si están mezclados, son factores detonantes para esta patología. El diagnóstico precoz, como en otras variantes del cáncer, se hace imprescindible para luchar contra la enfermedad. En este sentido la Clínica Odontológica Benalal de Madrid ha presentado un nuevo sistema de diagnóstico, el CDx, muy utilizado en Estados Unidos, que agiliza la detección de tumores orales. El problema es el coste del producto, que en España oscila entre los 125 y los 150 euros, y que algunas clínicas aplican en torno a los 400 euros. El sistema es muy sencillo, consiste en recoger muestras de una cavidad bucal en la que se presenten síntomas susceptibles de padecer enfermedad oncológica, como lesiones con potencial degenerativo o leucoplasias. El sistema permite recoger una muestra y contar con una respuesta fidedigna al cabo de 15 días, aunque en muy pocos centros se está utilizando actualmente, debido al coste de la prueba y a que sólo dos laboratorios en España (Madrid y Sevilla) la realizan. El resto tiene que ser enviado a Estados unidos. El paso siguiente, si el odontoestomatólogo detecta posibilidad de cáncer oral, consiste en derivar al paciente al especialista en maxilofacial para que aplique el tratamiento conveniente.

Las personas que tienen enfermedad de las encías tienen hasta un 21 por ciento más de riesgo de desarrollar cáncer, según un estudio del Colegio Imperial de Londres en Reino Unido que se publica en la edición digital de la revista The Lancet Oncology.
Los individuos con infecciones en las encías tienen mayores concentraciones de marcadores inflamatorios circulando en su sangre. Sin embargo, se desconoce si la inflamación sistémica, la invasión patógena en el flujo sanguíneo o la respuesta inmune ante la infección de las encías podría tener efecto sobre el riesgo global de cáncer o en varias localizaciones de tumores.
Los investigadores, dirigidos por Dominique Michaud, utilizaron datos del estudio HFPS sobre seguimiento de profesionales de la salud que comenzó en 1986 cuando los participantes masculinos del estudio tenían entre 40 y 75 años que respondían a cuestionarios enviados por la Universidad de Harvard en Estados Unidos. Además, cada dos años completaban cuestionarios de seguimiento y cada cuatro años cuestionarios sobre su dieta.

Durante el seguimiento, los autores registraron la enfermedad de encías con pérdida ósea, el número de dientes naturales y la pérdida de dientes en los dos años previos, así como los antecedentes de tabaquismo y consumo de alimentos. Los participantes informaron sobre cualquier diagnóstico nuevo de cáncer en los cuestionarios de seguimiento.
Se seleccionó a un total de 48.375 hombres con un seguimiento medio de 17,7 años para el desarrollo de su estudio. Entre estos individuos, se registraron 5.720 casos de cáncer. Los cinco cánceres más comunes fueron el colorrectal, el melanoma, el de pulmón, el de vejiga y el avanzado de próstata.

Después de tener en cuenta los factores de riesgo conocidos, que incluían los antecedentes de tabaquismo y dietéticos, los participantes con antecedentes de enfermedad periodontal tenían un 14 por ciento más de riesgo de cáncer en comparación con aquellos sin enfermedad de las encías.
En el caso de las localizaciones individuales del cáncer, aquellos con antecedentes de enfermedad periodontal tenían un aumento del riesgo de cáncer de pulmón, de riñón, de páncreas y de los hematológicos, en comparación con aquellas personas sin antecedentes de la enfermedad.
Según los investigadores, tener un número menor de dientes se asociaba con un 70 por ciento más de riesgo de cáncer de pulmón en comparación con individuos con entre 25 y 32 dientes. En las personas que nunca han fumado, la enfermedad periodontal estaba asociada con un 21 por ciento mayor del riesgo global del cáncer, y un 35 por ciento más de riesgo de los cánceres de la sangre. Por contraste, no se encontraron asociaciones con el cáncer de pulmón.

Los autores concluyen que la enfermedad periodontal estaba asociada con un pequeño pero significativo aumento del riesgo global de cáncer, que persistía en los que nunca habían fumado. Las asociaciones registradas para el cáncer de pulmón se deben probablemente a restos del tabaquismo.

Según los investigadores, el aumento del riesgo para los cánceres hematológicos, de riñón y pancreáticos necesita confirmación pero sugieren que la enfermedad periodontal podría ser un marcador de la susceptibilidad del sistema inmune o podría afectar de forma directa al riesgo de cáncer.

No hay comentarios: